
Tras mi paso por la clínica me gustaría contarle mi experiencia:Después de 30 años con gafas decidí que ya era hora de apartarme de estas, pero tenía miedo. Personas cercanas a mi me hablaron de su clínica y seguidamente busqué información en las redes sociales, pensé en ir pero la incertidumbre me hizo que tardara en pedir cita dos meses, por fin me decidí y llamé, me dieron la cita enseguida.Entré en la clínica con algunas dudas, ya que no sabía si me podían operar debido a que en uno de mis ojos solo contaba con el 40% de visión y además sufría de astigmatismo e hipermetropía. Tras la primera cita el personal de la clínica me dejó más tranquila, me realizaron todo tipo de pruebas, y además me trataron con un cariño excepcional. Cuando me dieron cita para la operación ni me lo pensé, además fue justo a la semana de la primera revisión, de nuevo volvió el miedo y la incertidumbre hacia ese momento; llegó el día previo a la operación y al entrar en la clínica de nuevo, mis miedos desaparecieron poco a poco, conocí al Doctor Tirado y me transmitió solo cosas buenas, en mi opinión uno de los mejores profesionales que he conocido sin duda, y desde lo personal alguien con el que sabes que puedes estar tranquila, te da la confianza suficiente para saber que todo va a salir bien. En su consulta el doctor me explicó cómo iba a ser la operación y también mencionó la dificultad de esta, pero aun así insistió en que todo saldría bien y consiguió mi tranquilidad y confianza.El ansiado día llegó, estaba bastante tranquila gracias al personal con el que contaba pero aún así algunos miedos aparecían ya que no sabía qué resultado íbamos a obtener, cuando llegó el momento de entrar al quirófano una de las enfermeras me preparó y sin duda me hizo sentir como en casa, sus palabras crearon en mi mucha paz y tranquilidad. Se abrió la puerta de quirófano y me recibió Manuel, profesional que me realizó todas las pruebas, tampoco tengo palabras para definirlo, sin duda grande tanto en lo personal como en lo profesional. Cuando la operación acabó levante mi cabeza y no podía creer aquello, veía sin la necesidad de utilizar unas lentes. No fui consciente del trabajo que habían realizado conmigo hasta que de nuevo entre en la consulta, eso no tiene precio. Me han dado la vida de nuevo cuando mis miedos me impedían cumplir mi sueño “quitarme las gafas para siempre” pensaba que nunca lo conseguiría. Solo me queda dar las gracias a todos y cada uno de los profesionales que componen el equipo del Doctor Tirado, y mi más sincera enhorabuena.
Un saludo, Virginia.
